Creo que todos los fotógrafos tenemos algún lugar a donde nos gusta ir una y otra vez. Quizá para repetir las mismas fotos en diferentes momentos, quizá para sentir como pasa el tiempo.
 
Este es uno de los míos, una pequeña cascada rodeada de un verde que las sequías mantienen a raya este año. Espero que el río recupere su caudal y los musgos vuelvan a tener el aspecto que lucían hace hoy un año.
 
En esta ocasión busqué una composición basada en diagonales y equilibrada con algunas piedras que encierran el salto justo en el centro de la toma. Elegí una velocidad adecuada para que el agua trazase sus sedas hacia la esquina inferior, separándola de la piedra desnuda.
 
Fuji X-T1 con Fujinon 10-24 1:4 a f/9 durante 5 segundos. Polarizador.
 
PN Fragas do Eume (A Coruña)