A principios de año dimos una vuelta por la zona de Asturias, fueron paseos sencillos, los que permitía la salud.
La preciosa luz del invierno nos brindó algunas puestas de sol muy bonitas, tamizadas con una niebla que proporcionaba profundidad y atmósfera.
Hoy, mientras aprovecho el tiempo para poner al día el archivo me vino a la mente una cita de El Principito:
“¡Ah, principito! Así, poco a poco comprendí tu pequeña vida melancólica. Durante mucho tiempo tu única distracción fue la suavidad de las puestas del sol.
Me enteré de este nuevo detalle, en la mañana del cuarto día, cuando me dijiste:
-Me encantan las puestas de sol. Vamos a ver una puesta de sol…”
Es este tiempo de perder muchas puestas de sol, pero es tiempo de apreciar que a veces necesitamos algo de niebla para entender la profundidad de la vida.
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Playón de Bayas
150 mm a f/6,4 a 1/125, 1/13 y 1s
HDR de 3 tomas
